El desayuno era excelente, con una

gran variedad de opciones frescas para empezar el día. Disfruté de la atención del personal, siempre amables y listos para ayudar. Sin embargo, el aire acondicionado en la habitación necesitaba algunas mejoras y hacía un poco de ruido.

Ubicación céntrica cerca de la Plaza del Obradoiro, Jardín encantador con área de descanso, Edificio histórico bien conservado

El aire acondicionado olía raro y no funcionaba adecuadamente. Los ascensores son pequeños y antiguos. Además, el colchón estaba tan desgastado que podía sentirme hundido después de acostarme. Sin opciones para cenar en el hotel, la experiencia se volvió limitada!!!

Las camas estaban tan incómodas que me despertaba cada horas, y aunque pedí un secador, me dieron uno que parecía de juguete. Además, esperaba un trato especial, como un obsequio por las molestias, pero nada. Imagino que la atención es solo para los clientes regulares, y no como yo, que solo esperaba lo mejor.

Aprovechar el desayuno en el jardín fue un gran comienzo de día, y la atención del personal siempre me hizo sentir bienvenido.

Aprovecha el desayuno en el jardín. es un lugar tranquilo para empezar el día. Además, busca habitaciones que den al interior para mayor comodidad.

El jardín es realmente un oasis en la ciudad.

El acceso a la habitación por la noche es complicado. Solo se puede entrar por la puerta principal y es molesto tener que llamar para abrir. Esto puede ser un problema especialmente si llegas tarde. Además, la ducha carecía de buena presión, lo que hizo que la experiencia no fuera del todo cómoda.

La ubicación es muy buena, al lado del mercado y con fácil acceso al centro histórico. La habitación tenía un encanto especial con su reforma cuidada, y el personal fue siempre amable y servicial. Sin embargo, el aire acondicionado necesitaba mejoras y había problemas con la presión del agua en la ducha, lo que afectó un poco la comodidad.

Para quienes buscan una experiencia encantadora

El jardín es realmente un oasis, un lugar perfecto para relajarse y olvidarte del ajetreo de la ciudad. Además, el personal era tan amable, incluso me recomendaron un par de restaurantes que no me decepcionaron para nada.

No fue barato, pero valió la pena.

Desayuno abundante en el jardín.

Wifi rápido y personal atento, pero el aire acondicionado no funcionaba bien.

La ubicación es excelente, justo al lado de la zona monumental. El jardín interior crea un ambiente hermoso y acogedor que es perfecto para relajarse después de un día de exploración. El desayuno en el jardín es un gran toque.

El aire acondicionado podría mejorar, ya que tenía un olor desagradable. Algunas habitaciones pueden experimentar ruidos provenientes de bares cercanos en horas de la noche.

Despertar cada mañana y disfrutar del desayuno en el jardín fue como recibir un abrazo cálido del sol. La selección incluía un buffet donde las tortillas eran más suaves que un susurro y los zumos frescos parecían bailar en el paladar. Sin duda, el jardín era un verdadero oasis en la ciudad, permitiendo relajarse como en vacaciones eternas.

Ducha con poca presión

el hotel es brutal, todo super limpio y chido, tiene un jardín precioso donde puedes relajarte y olvidarte del bullicio. la habitación era muy cómoda y amplia, con unas vistas geniales. el desayuno estaba de lujo, una variedad tremenda y el café estaba buenísimo. el personal super atento y amable, siempre listos para ayudar. ubicación perfecta, a un paso del centro pero en un lugar tranquilo.

lo único es que el aire acondicionado estaba algo flojo y el acceso a la habitación por la noche es un poco lioso, tienes que llamar.

estancia agradable pero con detalles a mejorar

Me desperté cada mañana disfrutando del delicioso desayuno en el jardín, que era un verdadero deleite para los sentidos. La habitación era acogedora y contaba con sábanas irresistiblemente suaves, ideales para un buen descanso. Además, el personal se destacó por su amabilidad, siempre dispuesto a ayudarme con una sonrisa.

La presión del agua en la ducha no era suficiente, lo que afectó un poco mi experiencia al ducharme.

volvería encantado

Hotel perfecto, justo enfrente del Mercado de abastos. La habitación era increíble, con un balcón grande y vistas, cama extra grande y cómodisima, baño bonito y un toque de madera muy agradable. Disfrutamos mucho el desayuno, especialmente el pan gallego. El personal fue muy cordial, especialmente al hacer el check-in.